Mi Citroën 3CV

Iba manejando un Citroën 3CV, no recuerdo de donde venía pero me metí en una calle y estaba en contramano. Pegaba una curva.
Me bajé del auto para seguir pie y lo dejé en ele garaje de otra casa. Cuando lo miré, había chocado contra el garaje no metido de frente sino de costado.
Me asusté, mis viejos querían cambiar ese auto pero yo ya me había encariñado con el, ya le había agarrado la mano. Lo mas difícil de manejar del auto, era que para abrir o cerrar el baúl o los asientos de atrás, había que sacar una máquina para envasar dulces.
Miré el auto y observé que lo habían pintado encima con esmalte sintético rojo. El auto en realidad era naranja y rojo. Comencé a masajear la chapa y se enderezó. Esto lo estaba haciendo en el garaje de mi casa. Estaba con Javier C. y alguien más que no recuerdo quien era. Después expliqué como había enderezado la chapa al Javi pero no se entendía, era imposible.

Comentarios

  1. Es fácil de explicar lo del enderezamiento de la chapa: todo se arregla con amor.

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