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Mostrando entradas de diciembre, 2011

Cara

Estaba con Natalia M., y tenía un sobrino que era rubio y alto, había crecido mucho. Su cara había cambiado de forma considerablemente

Procesión en la nieve

Estaba con mi primo Nicolás P. en medio de la montaña toda nevada y teníamos que hacer una procesión para que bajar los precios de los colectivos o tuviéramos que viajar gratis. La marcha consistía en caminar todo el día por la nieve, yo tenía pantalón corto y chancletas. Natalia M. estaba preocupada por como estaba vestido, iba a tomar frío, yo igual tenía que hacerlo.

Fotos porno

Una compañera de facultad de mi hermano Matías M., la cual no conozco ni he visto, había echo un trabajo práctico en el cual, se había sacado una sesión de fotos pornográficas junto a su padre. Ella trabajaba como actriz porno.

Monedas grandes

Habían salido nuevas monedas para reemplazar los billetes acorde a la inflación. Las monedas eran doradas plateadas y cobrizas. Habían monedas de 8 pesos que eran grandes del tamaño de una billetera o mas. Eran huecas, tipo marco y con un tirabuzón en el medio.

Asesino

Con Natalia M. teníamos las entradas para una fiesta. Estaban a nombre de unos vecinos, pero nos las habían regalado porque ellos no iban a poder ir. La entrada del vecino tenía algo que parecía una foto de él, pero la de ella tenía la misma foto así que no había nada por lo que temer. Íbamos rodeando una ciudad oscura y la fiesta quedaba en un castillo antiguo sobre una montaña. Cuando llegamos a la entrada, había mucha gente y estaban eligiendo una Miss Universo. Al entrar, Natalia tenía el miedo que detectaran que las entradas no fuesen nuestras, pero la chica de la boletería ni la miró y nos dijo “¡Pasen!”. Cuando entramos, el acto de coronación se estaba dando en un salón bastante pequeño pero reluciente. Nos fuimos a la parte de atrás del salón donde había laberintos de paredes blancas y de 3 metros y medio de alto con sillones blancos y unas terminaciones en habitaciones blancas y de blancos sillones también. En una esquina medio oscura del laberinto, apareció un hombre de raza

El gordo

Me había juntado con amigos en una casa. Estábamos con Natalia M. durmiendo en una cama estilo antigua, cubierta con tela. La cama era de un gordo con pelo largo, lacio y atado con un colín. Usaba remera suelta y pantalones cortos color beige. El gordo, al vernos durmiendo en ella, despertamos. La casa también era del gordo, era grande estilo chorizo antigua. El sólo vivía en una parte. Las otras que daban a un patio interno bastante enorme, eran: una cárcel de recuperación para bebés villeros y otra para perros bebés asesinos, que tenían dientes de tiburón, pero les habían dejado solo 3 de cada lado, por lo que te mordían pero no te lastimaban. En un momento, me di cuenta que Natalia no estaba al lado mío. Traté de llamarla al celular pero no me atendía, estaba con el gordo, se había ido. Me acordé que los padres del gordo trabajan frente a un negocio que conocía, así que fui para allá tomando un atajo por las calles (ellos se habían escapado atravesando un zanjón). Cuando llegué al n

El enano maldito

Estaba durmiendo en la habitación del fondo de la casa de mis suegros, en la cama del lado izquierdo. La puerta de afuera estaba afuera y estaba amaneciendo. Por la puerta apareció un enano maldito, tenía las orejas puntiagudas como un elfo. No tenía apariencia física, era una sombra centelleante. Avanzó hacia la cama rodeándola y acercándose hacia mí por el lado de la mesa de luz. Yo empecé a tener un ataque de pánico, un miedo insoportable. Pensaba “¿Porqué Natalia M. no está al lado mío?”

Mariposa blanca

Estaba con mi cuñada Mariana M., en el garaje de la casa mis suegros a punto de comer. Había tablones con caballetes. Apareció una mariposa blanca amarillenta posada sobre la pared. Sus alas estaban planas sobre la superficie, como si estuvieran pegadas, no pensé que pudiera moverse o salir de ese estado, pero en un momento, levantó sus alas y comenzó a volar despegandose de la pared.